Toda una vida dedicada al arte

SEGUNDO ALVARADO

“Región”, Orense

No hay que meterse bajo el agua de la piscina y contemplar cómo los colores de los trajes de baño, las siluetas de los bañistas, los recuadros de los trampolines, se hacen figuras sinuosas, cambiantes, móviles, como si fueran entes vivientes convertidos en oníricas sirenas.

Esta temática, traducida al color, a la forma y a una geometría de planos coloreados en azules, verdes, amarillos, sepias… es lo que Canónico ha llevado a ese lienzo de pared del interior de la piscina de Los Remedios de Orense. Hay una mezcla de surrealismo y abstracción. En cierto modo, una nueva figuración que transciende de lo que hemos podido ver de sus esculturas.

En suma, que el artista gijonés, que se lleva de Orense gratos recuerdos, nos ha dejado una obra suya, con la que, en un recinto deportivo, se inaugura una obra de arte. Lástima de toda la pared, todo el muro, todos los granes paneles del recinto no sean la continuación de esta obra mucho más poderosamente sugerente que la fría y gregaria publicidad.

Al lado de la silueta del atleta del agua, surge el contorno sinuoso de la figuración acuática. El atleta no es sino nuestra imaginación en marcha hacia la humana emulación; el mural, es esa misma imaginación, pero traducida a la estética por el poder creador del artista.